Ayer tuve una noche de las mías de domingo. Podría describirse como una noche de insomnio provocada por las deshoras de sueño. Intenté dormir a una hora más adecuada de una manera que creí que sería lo más lógica posible: Dormir poco esa noche para poder dormir un poco más la noche del domingo al lunes, el peor día para los jóvenes y afortunados, en estos dificiles momentos, trabajadores.
Pero afortunadamente no me pude dormir. Y digo afortunadamente porque me ayudó a descubrir una canción que había oido muchas veces pero nunca llegué a saber de quien era. Me llamareis inculto y con razón, puesto que es un artista reconocido, y una canción muy famosa. A mí me ha parecido una canción con una letra un poco chocante, imagino que algo sorprendente para la época en que se editó el disco (1972). Por suerte para mí, mi poco nivel de inglés, pese a que estos últimos meses ha mejorado algo, no me ha permitido traducir la canción en su totalidad usando el oido, pero sí lo suficiente como para sacar una pequeña frase y empezar mi búsqueda por la Red. Entonces ese insomnio me ayudó a descubrir que el título de esa canción es el mismo que el de esta entrada del Blog (Walk on the wild side) y que el artista en cuestión se llama Lou Reed. y que gracias a mi fallido nivel de inglés me pareció una canción que suena preciosa, como si fuera algo privado. Como si el cantante en cuestión sólo la quisiera tocar para tus oidos mientras estas dando un paseo nocturno de camino a casa pasando por la Plaza de Atocha, o de la Cibeles.